La mantequilla de maní es uno de los productos “para untar” más populares del mundo y está preparada, como su nombre lo indica, a base de maní o cacahuates.
Dentro de su composición nutricional destacan los tres macronutrientes que tu cuerpo necesita para funcionar de forma óptima (grasas, proteína y carbohidratos) y además contiene considerables cantidades de vitaminas y minerales como la vitamina E, vitaminas del grupo B, magnesio y manganeso.
La mantequilla de maní también es rica en calorías, por lo que debe consumirse de forma moderada y en el contexto de una alimentación balanceada.
Es importante resaltar que las mantequillas de maní comerciales (la mayoría de ellas) están hechas con maní, aceites vegetales dañinos, azúcar (u otros edulcorantes) y excesivas cantidades de sal. Por esto es importante que vigiles muy bien la lista de ingredientes o que la prepares en casa.
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En Viva mi Salud te enseñamos a preparar una mantequilla de maní casera en tres sencillos pasos:
Ingredientes
- 200 gramos de maní natural
- Sal al gusto
Implementos de cocina:
- Sartén
- Procesador de alimentos (o licuadora con buena potencia)
- Espátula
- Frasco hermético de vidrio
Preparación
1. En un sartén caliente pon a tostar el maní hasta que esté dorado.
2. Lleva el maní al procesador de alimentos y procesa a máxima velocidad. Este proceso puede tomar varios minutos (dependiendo de la potencia de tu procesador).
Cuando veas que el maní se pega a las paredes de tu procesador, usa la espátula para retirarlo y sigue procesando. Al principio el maní se volverá harina, pero después de unos minutos tomará la consistencia de crema.
3. Agrega la sal, revuelve, prueba y guarda en el frasco de vidrio.
Opcional: También puedes experimentar con tu preparación y agregar otros ingredientes para dar un sabor diferente. Por ejemplo, puedes probar añadiendo cacao, stevia, canela o semillas de chía, entre otras opciones.
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