María del Mar Morales
Health coach - Esp. en Nutrición
El ácido glicólico es un ingrediente presente en una gran variedad de productos para el cuidado de la piel como limpiadores, hidratantes, despigmentantes y exfoliantes, e inclusive puede adquirirse en forma de suero o tónico con diferentes concentraciones. Pero, ¿cuáles son sus potenciales beneficios y qué precauciones se deben tener en cuenta al momento de usarlo?
Este ácido pertenece al grupo de los alfa hidroxiácidos, se deriva de la caña de azúcar y es muy usado en la práctica dermatológica como agente exfoliante por su capacidad para eliminar suavemente la capa externa de las células de la piel, incluidas las células muertas, y acelerar así su proceso de renovación.
Además, el acido glicólico tiene la capacidad química para retener la humedad en esa piel recién exfoliada, por lo que optimiza la hidratación y previene la resequedad de la piel.
Este ingrediente también ayuda a estimular la producción de colágeno, la proteína más abundante del cuerpo humano que aporta firmeza y elasticidad a la piel, y cuya producción natural va disminuyendo a partir los 30 años de edad.
Otro beneficio asociado al uso del ácido glicólico tiene que ver con que, al eliminar las células muertas de la superficie de la piel, permite una penetración más profunda de otros ingredientes usados en la rutina para el cuidado de la piel, por lo que optimiza su rendimiento.
Finalmente, el ácido glicólico también es usado para atenuar la hiperpigmentación leve y las cicatrices del acné.
Resumen de beneficios
Resumiendo lo mencionado anteriormente, el ácido glicólico puede resultar un ingrediente útil para:
- Obtener una piel más suave, brillante y tersa
- Mejorar la hidratación de la piel
- Atenuar lineas de expresión y arrugas finas
- Aumentar la firmeza y elasticidad de la piel
- Atenuar la hiperpigmentación leve
- Atenuar las cicatrices producidas por el acné
- Combatir la obstrucción de los poros y prevenir el acné
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Recomendaciones y precauciones sobre su uso
Debido a su efecto exfoliante, el ácido glicólico puede generar una ligera irritación, enrojecimiento o sensación de ardor, sobre todo en pieles sensibles. Es por esto que se recomienda iniciar con concentraciones bajas (inferiores al 4 o 5 %) y aumentar paulatinamente si así se desea.
Las personas que tengan alguna condición dermatológica diagnosticada, es conveniente que consulten siempre con un especialista antes de incluir un nuevo ingrediente en su rutina para el cuidado de la piel.
Otras recomendaciones a tener en cuenta son:
- En la primera aplicación testea tu sensibilidad aplicando una pequeña cantidad en una zona de la frente.
- Aplícalo preferiblemente en las noches
- Usa el ácido glicólico después del limpiador y antes de la crema hidratante
- Aplícalo en todo el rostro, evitando los ojos, los labios y la boca.
- Evita frotar el producto en el rostro. Simplemente aplícalo suavemente y déjalo actuar.
- Recuerda usar protector solar al día siguiente pues el ácido glicólico la deja más sensible a los rayos UV.
- Evita usar este ingrediente junto con otros exfoliantes químicos y tampoco en pieles quemadas por el sol o en acné inflamado (al menos no sin antes consultar con un dermatólogo).
- Aplica 2 o 3 veces por semana.
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Referencias:
- The efficacy of glycolic acid for treating wrinkles: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/11514125/
- Glycolic acid peel therapy – a current review: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3875240/
- Retinoic acid and glycolic acid combination in the treatment of acne scars: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4375771/
