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Los tratamientos más populares para combatir la depresión incluyen medicamentos, psicoterapia, meditación y redes de apoyo, sin embargo se ha demostrado que llevar una alimentación adecuada también puede contribuir a mejorar la sensación general de bienestar físico y mental de una persona. Aunque no existe una dieta especifica para tratar la depresión, diferentes estudios científicos han encontrado que ciertos alimentos y bebidas deberían ser evitados (o limitados) cuando se padece esta condición pues podrían exacerbar los síntomas. A continuación se mencionarán algunos de ellos, sin embargo ten presente que ante una sospecha de depresión debes acudir inmediatamente a tu médico para iniciar con el acompañamiento adecuado: 1. Azúcar y carbohidratos refinados Puede que cuando estés triste se te antoje un helado, una donut o un buen trozo de chocolate, sin embargo se ha demostrado que, lejos de ayudar, el consumo excesivo de azúcar puede aumentar el riesgo de trastornos del estado de ánimo, incluyendo la depresión y la ansiedad. (1) (2) El consumo repetido de azúcar y carbohidratos refinado durante el día propiciará que tus niveles de azúcar en sangre estén subiendo y bajando abruptamente como en una montaña rusa, lo que a su vez puede acarrear alteración en el estado de ánimo y sensación de fatiga. Recuerda que el azúcar no solo está presente en la sustancia arenosa blanca que agregas a tus alimentos y bebidas, sino que también se encuentra en gran parte de los productos que compras en los supermercados, bajo nombres como: Dextrosa Fructosa Lactosa Maltosa Sacarosa Jarabe de maíz Azúcar invertido Para conocer los otros nombres que equivalen a azúcar en una etiqueta nutricional, da CLIC AQUÍ. Los carbohidratos refinados, por su parte, se encuentran en alimentos como galletas industriales, tortas, cereales de caja, bollería industrial, pan blanco, dulces y refrescos. 2. Aceites vegetales refinados Los aceites vegetales ricos en omega-6 pueden propiciar inflamación dentro de tu cuerpo y se ha demostrado que la inflamación juega un papel en la causa de algunas formas de depresión y fatiga, y puede interferir en la efectividad de los tratamientos antidepresivos (3) (4) (5). Algunos aceites vegetales que, además de ser altamente procesados, suelen contener cantidades elevadas de ácidos grasos omega 6 son: Aceite de soya Aceite de algodón Aceite de colza Aceite de sésamo Aceite de semilla de uva Aceite de salvado de arroz Aceite de cártamo Aceite de maíz Aceite de girasol Prefiere siempre el aceite de oliva, el aceite de aguacate o el aceite de coco. Descubre también: Lo que necesitas recordar al comprar un aceite de oliva 3. Alimentos ultraprocesados Los alimentos ultraprocesados no solo suelen contener cantidades elevadas de azúcar y grasas dañinas, sino que también contienen otros ingredientes que se han relacionado con alteraciones en el estado de ánimo, sobre todo en personas especialmente sensibles, como el aspartame (6) (7) (8) y algunos colorantes artificiales como la tartrazina (9). Aunque hacen falta más investigaciones para esclarecer estas conexiones, los alimentos ultraprocesados (con más de 5 ingredientes) no aportan beneficios desde el punto de vista nutricional que contrarresten los potenciales riesgos. Así que prueba disminuyéndolos y revisa cómo te sientes. Descubre también: 6 ingredientes que deberías evitar al comprar alimentos 4. Alcohol El alcohol puede propiciar o empeorar los síntomas depresivos y la depresión a su vez puede hacer que las personas consuman grandes cantidades de alcohol para encontrar una suerte de "alivio" momentáneo. Es así como la coexistencia estos dos trastornos se asocia con una mayor gravedad y un peor pronóstico para ambos. (10) La falta de alcohol no causa ningún problema de salud, así que definitivamente lo mejor que puedes hacer si padeces depresión es alejarte de este tipo de bebidas. 5. Gluten (si eres sensible) Aunque la sensibilidad al gluten es una condición que aún está siendo estudiada e investigada, existe alguna evidencia científica que sugiere que las personas sensibles (no celiacas) a este conjunto de proteínas pueden experimentar diferentes síntomas extraintestinales como fatiga, dolor de cabeza, ansiedad y alteraciones en los estados de ánimo. (11) Recuerda que el gluten está presente en en el trigo, el centeno, la cebada y el triticale, y que un diagnóstico de sensibilidad al gluten se basa en los síntomas persistentes y se establece solo después de descartar celiaquía y alergia al trigo (mediante pruebas de laboratorio). Descubre también: Síntomas de sensibilidad al gluten que no debes ignorar

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